Hace exactamente 74 años, la Asamblea General de la ONU firmó el Convenio para la Represión de la Trata de Personas y de la Explotación de la Prostitución Ajena. Este hito hizo que, en 1985, se catalogará el 2 de diciembre como el día para la abolición de la esclavitud, para conmemorar el tratado, pero por encima de todo con el objetivo de concienciar a la población y erradicar las formas contemporáneas de esclavitud, conocidas como esclavitud moderna.

Para Jessica Turner, gerente de la organización Anti-Slavery International, el concepto de esclavitud moderna hace referencia a “todas las formas actuales de explotación, para beneficio personal o comercial, a las que una persona es sometida en contra de su voluntad. Es una situación que afecta a personas que se han visto obligadas a renunciar a su libertad”.

Por su parte, María Collazos, analista de políticas e investigación de Walk Free apunta que la esclavitud moderna es un término general. “Al final, cuando hablamos de este tema, estamos tratando de varias formas de opresión, desde el trabajo forzoso, la trata de personas, en los que se incluyen las víctimas de explotación comercial sexual, la servidumbre o el matrimonio forzoso”.

Los últimos datos disponibles en relación con esta problemática estiman que en el año 2021 había un total de 50 millones de personas viviendo bajo condiciones de esclavitud moderna. De hecho, según este informe expuesto por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Walk Free y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en tan solo cinco años, el número de individuos en esta situación incrementó en diez millones.

Es así, que una de las principales preocupaciones de la OIT, es el incremento de personas que viven esta coyuntura. “Los constantes conflictos y guerras provocan que millones de personas tengan que migrar y pasen a una situación de vulnerabilidad, hasta el punto de, en contra de lo que ellos querrían, aceptar trabajos que ellos no quieren” explica Axil Nasri acerca de las razones de este aumento de la esclavitud.

Más de la mitad viven en países del G20

Contrariamente a lo que uno podría pensar, estas situaciones no solo ocurren en países en vías de desarrollo, ya que hay muchos países del primer mundo y democráticos con miles de sere humanos sometidas a la esclavitud. De hecho, en los países del G20, que presentan el 85% del PIB mundial, viven más del 50% de las personas sometidas a este tipo de vida.

Collazos asegura que esto sucede porque la esclavitud moderna no deja de ser un negocio: “La erradicación de la esclavitud pasa por la voluntad política de que existan marcos legales y las protecciones sociales adecuadas para la población vulnerable y que sean relevantes para el contexto actual”. Por ejemplo, desde Walk Free creen que en Europa se deberían crear marcos legales para proteger a los inmigrantes que vienen de Ucrania, en definitiva, para cuidar a los más vulnerables.

Y es que las personas que acaban en este tipo de escenario, son, en su enorme mayoría, debido a la constante vulnerabilidad en la que se encuentran a causa de los débiles sistemas de protección, ya sea por conflictos constantes en su territorio, o por ejemplo marcos legales que discriminan a las mujeres. “Alrededor del 90% de las víctimas de explotación sexual comercial en todo el mundo son mujeres y niñas que viven en contextos sociales que las denigran y acaban por obligación siendo sexualmente explotadas” subraya Collazos a La Vanguardia.

Eso sí, Turner considera que aunque las personas más afectadas son las que se encuentran en un estado de vulnerabilidad “cualquiera puede llegar a una situación de esclavitud, que a veces es prácticamente invisible hasta para uno mismo”.

La esclavitud en España

Según el último ranking elaborado por Walk Free, los países con más esclavos por habitantes son Corea del Norte con 104,6 personas por cada mil, seguida de Eritrea con 90,3 y Mauritania con 32.

Por su parte, España está clasificada en la posición 136, de 160, del índice de prevalencia de esclavitud. Además, se estima que por cada mil personas que viven en territorio español, 2,3 se encuentran en una situación de esclavitud contemporánea, es decir, un total de 108.000 habitantes en el país.

“Aunque países como España y el Reino Unido tienen leyes en contra de estas prácticas opresivas, hay sectores en los que la represión es muy pobre, en especial los servicios, la construcción y la manufactura” argumenta Nasri en relación con la existencia de esclavitud en los países democráticos.

Asimismo, en el informe se especifica que que la gran mayoría de los ciudadanos españoles se encuentran en situaciones de poca o nula vulnerabilidad. Por contra, también se hace hincapié en que las acciones del gobierno podrían ser mejores, aunque, eso sí, siguen estando por encima de la media de Europa y Asia Central.

“Ahora, nuestro trabajo radica en prevenir y en conseguir que la comunidad internacional coopere y empiece a castigar seriamente todas estas prácticas” finaliza Nasri.

Fuente: lavanguardia.com