La sede del Observatorio por las mañanas es un espacio de co-working compartido por varias ONGs o entidades relacionadas con los derechos humanos. Entre ellas tenemos un acuerdo de colaboración con CAMINANDO FRONTERAS, un colectivo de defensa de los derechos de las personas y comunidades migrantes, creado  el año 2002, fruto de la sinergia y el encuentro de diversos defensores y defensoras de Derechos Humanos situados en diferentes territorios de la Frontera Occidental Euroafricana. Este colectivo actúa desde una perspectiva transnacional, transcultural, antirracista y feminista mediante la cual denuncia las fronteras como espacios de impunidad. Luchando por el restablecimiento de los derechos en estos no lugares, tejiendo redes con las personas y comunidades en movimiento.

Una de las fundadoras de este colectivo es Helena Maleno, reconocida activista de derechos humanos que ha venido sufriendo hostigamiento y persecución por su clara defensa de los derechos de las personas y comunidades migrantes. En esta ocasión, el Observatorio se une a la cadena de voces que desde tantos lugares dentro y fuera de España están apoyando a Helena y su familia tras haber sufrido de hecho la expulsión del territorio marroquí donde habitualmente residían ante la pasividad del Estado español

Por ello y en coherencia con la intención de oración del papa Francisco para el mes de abril, orando por las personas perseguidas por su compromiso con los derechos humanos, el Observatorio ha promovido y se ha sumado a la nota emitida por entidades religiosas en apoyo de Helena Maleno. Así como ha firmado la “Carta de la Ciudadanía y las organizaciones” enviada por particulares y entidades, al presidente del Gobierno.

Desde aquí expresamos  nuestra solidaridad con Helena Maleno y su familia, e invitamos a la Familia Dominicana a firmar la Carta y  a profundizar en la labor que el colectivo Caminando Fronteras viene realizando, tarea que estorba a algunos Estados y que está detrás de esta persecución que denunciamos.

“Para defender los derechos humanos fundamentales hace falta coraje y determinación. Me refiero a oponerse activamente a la pobreza, la desigualdad, a la falta de trabajo, de tierra, de vivienda, de derechos sociales y laborales. Piensen que muchas veces los derechos humanos fundamentales no son iguales para todos. Hay gente de primera, de segunda, de tercera y de descarte. No, tienen que ser iguales para todos. Y en algunos lugares defender la dignidad de las personas puede significar la calumnia”. (Papa Francisco)