El 2 de diciembre se conmemora el Día Internacional para la Abolición de la Esclavitud, una efeméride necesaria aún en la época actual donde, si bien el concepto asociado al cine y la literatura ha desaparecido en cierto modo -que tampoco por completo- existen todavía hoy otras formas de esclavitud consideradas modernas, pero no por ello menos graves.

No es baladí seguir utilizando un término tan duro para describir la situación que viven muchas personas a lo ancho y largo del planeta, no solamente en el aspecto “laboral” -del que son víctimas 28 millones de personas en todo el mundo- sino también en lo que a matrimonio forzado 22 millones– u otras cuestiones a las que las personas se ven expuestas en contra de su voluntad se refiere.

En este sentido, la Organización Internacional del Trabajo cifraba en 50 millones las personas en situación de esclavitud moderna en comparación con los anteriores datos que se tenían (2016). Además, el problema sigue la dirección de la mayoría de las brechas sociales, sino todas: las mujeres y los niños son los más vulnerables.

Además, la esclavitud no entiende de edades, religiones ni siquiera clase. Evidentemente, las dificultades son más notorias en los países con niveles adquisitivos más bajos, en los que el poder recae sobre unos pocos, pero la zona contrario del globo también sufre esta lacra. Un dato muy revelador de ello es que más de la mitad de los trabajos forzados y una cuarta parte de la totalidad de matrimonios de la misma característica se encuentran en lugares de renta media-alta.

¿Por qué el 2 de diciembre es el Día para la Abolición de la Esclavitud?

Los días internacionales nunca están escogidos al azar. Sí es cierto que algunos tienen su origen en una fecha más estudiada que otros, siendo ese el caso del Día para la Abolición de la Esclavitud.

Así las cosas, el 2 de diciembre fue escogido como el día para conmemorar la lucha contra este problema ya que en ese día de 1949 se firmó el Convenio para la Represión de la Trata de Personas y de la Explotación de la Prostitución Ajena.

¿Qué formas de esclavitud existen en la actualidad?

Como se ha mencionado, la esclavitud está presente en el mundo actual de muchas formas. Además de las ya expuestas, hay que destacar todas las relativas a la trata de personas, la explotación sexual, el trabajo infantil y los conocidos como niños soldado. Es decir, aquellos que son reclutados para participar de conflictos bélicos.

Además de las mujeres y los niños, también las personas migrantes sufren métodos totalmente contrarios a la libertad. Uno de los ejemplos más claros se encuentra en el presente Mundial de Qatar, donde han muerto más de 6.500 obreros construyendo estadios.

De este modo, con la esclavitud pasa actualmente algo similar a lo que sucede con las torturas, siguen teniendo lugar aunque no siempre sucedan de una manera tan explícita -otras sí- como las que históricamente hemos visto en la gran pantalla o en los libros.

Acciones para luchar contra esta lacra

Los organismos oficiales no cesan en su lucha para erradicar esta lacra. Sin ir más lejos, las propias Naciones Unidas llevan en su programa la Convención Sobre los Derechos del Niño, que reconoce en su artículo 32 el derecho a este a estar protegido “contra la explotación económica y el desempeño de cualquier trabajo que pueda entorpecer su educación o ser peligroso, así como nocivo para la salud o su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social”.  Siguiendo dicha línea, la ONU cuenta también con un Protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas.

Lo mismo ocurre con los gobiernos, muchos cuentan con un plan pensado para estos aspectos. El español no es una excepción y dispone de un Plan Estratégico Nacional contra la Trata y la Explotación de Seres Humanos hasta el año 2023.

Asimismo, esta semana el Consejo de Ministros daba luz verde a una ley para luchar contra la trata y las mafias, no sin polémica por parte de los departamentos de Igualdad y Justicia, ya que el primero quería aprobar un proyecto centrado en la trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual; mientras que el segundo consideraba que era necesaria una ley integral para todo tipo de trata.

El texto -que contempla cárcel para explotadores sexuales y derechos a las víctimas- llega más tarde de lo esperado sin uno de los reclamos del ala morado del Ejecutivo: que las víctimas de trata en situación administrativa irregular puedan obtener los papeles sin necesidad de interponer una denuncia previa. En cualquier caso, no deja de ser una prueba de los esfuerzos gubernamentales para con esta materia.

 

Fuente: elplural.com