El fraile dominico vasco Xabier Gómez habló de su nombramiento como obispo de Sant Feliu de Llobregat expresando su sorpresa y agradecimiento. En una entrevista concedida a Ràdio Estelminutos después de la rueda de prensa en la que fue comunicada oficialmente la noticia, el religioso destacó su voluntad de “ponerse al servicio de la diócesis y del pueblo de Dios”.

Gómez, que ha dedicado en los últimos años al trabajo al servicio de los migrantes desde el Departamento de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española, considera que la diversidad de la diócesis es una riqueza a aprovechar. “Las familias migrantes contribuyen al enriquecimiento de la sociedad, tanto desde el punto de vista económico como cultural, y también suponen una revitalización para las comunidades católicas las personas que vienen de fuera, los recién llegados, que también nos dan vida a las nuestras comunidades”, dijo el obispo electo.

En la entrevista mostró también su preocupación por el aumento del rechazo hacia los migrantes , especialmente en contextos como las islas Canarias, donde a lo largo de este 2024 ha habido un fuerte incremento de llegadas. El dominico defendió que “la Iglesia debe ser un espacio de acogida e integración: “Como Iglesia promoveremos justamente lo contrario del rechazo: la cultura de la hospitalidad”, reiteró.

Con formación en orientación y mediación familiar, Gómez destacó la importancia de la familia como pilar de la sociedad y de la Iglesia. “La familia, con sus desafíos, es fundamental para el crecimiento de la sociedad y de la Iglesia”, comentó.

Preguntado por su lema, Humilitas [humildad], explicó que se trata de una palabra que para él representa la base de la vida espiritual. “La humildad nos permite trabajar con empatía y buscar la verdad “, señaló Gómez, que prescindirá del escudo episcopal para enfocarse en “una espiritualidad más sencilla y arraigada”.

Fuente: religiondigital.org